Los planes de emergencia son para vivir dignamente

Hugo MoreiraHugo Moreira es un viejo cortador de caña de azúcar de los cañaverales de Bella Unión. Tiene ocho hijos y es “peludo” desde el año 1981, cuando no había zafra, “yo era andante”, nunca pude tener un rancho, mucho menos una casa, con el transcurso del tiempo, siempre luchábamos por tener algo para no vivir más en carpa con lo que eso significa, el frío del invierno y el insoportable calor del verano. El día que cobré el primer Plan de Emergencia “me compré un rancho y le dije a mi señora, por fin salimos de la ruta y tenemos nuestra casita”
Cuando el Instituto Nacional de Colonización comenzó a difundir la posibilidad de entregar tierras a los asalariados rurales yo comencé a trabajar en el proyecto “Uruguay Trabaja”, todos se sentaban y escribían en un cuaderno, yo no sabía leer ni escribir, el MIDES me dio la posibilidad de estudiar, terminé sexto año, fui progresando, aprendí computación, el año pasado trabajé en carreteras solidarias y empecé a cobrar por mes, aprendí a ahorrar. Antiguamente en la caña de azúcar ganaba mil pesos por semana, terminaba la zafra, llegaba el verano, tenía que vender las pocas cosas que compraba para poder “darle de comer a mis hijos” hoy aprendí a organizarme, tengo una tarjeta de crédito, y todavía me sobra plata en el bolsillo.
El futuro de mis hijos y nietos está asegurado porque ellos consiguieron tierras para trabajar y de esa manera vamos a salir adelante. Antes, cuando se terminaba la zafra, salíamos con mi esposa a pedir en el barrio, porque no teníamos nada para comer, hoy trabajamos todos, mis hijos van a plantar y a criar animales después de hacer “Un ranchito” para vivir dignamente.